No
hace falta ser médico cardiólogo en
Asturias para saber que cualquiera de las posibles afecciones que pueden
afectar al corazón debe ser tratada como un problema de la máxima gravedad. Al
fin y al cabo estamos hablando del órgano que regula la circulación de la
sangre y, cuando falla, el riesgo de muerte es evidente. En el interior del
corazón encontramos diferentes válvulas que tienen la función de permitir el
paso de la sangre en un único sentido y puede ocurrir que, por la presencia de
microorganismos, alguna de ellas o, incluso todas, se inflamen como
consecuencia directa de la infección: es lo que conocemos como endocarditis.
La causa de la endocarditis es siempre una infección que se produce
originariamente en otro punto del cuerpo. Podría resultar extraño que una
infección urinaria, por ejemplo, desemboque en una endocarditis, pero no lo es
tanto si piensas que la misma sangre que riega el aparato urinario termina por
atravesar el corazón y, cuando llega a él, puede llevar alguna de las bacterias
que han provocado la infección.
Cualquier médico cardiólogo en Asturias
puede explicarte que para que surja este problema, en la mayoría de las
ocasiones, los pacientes tienen antecedentes de otras enfermedades cardiacas,
aunque también se conocen casos de pacientes que tenían antecedentes de
adicción a drogas intravenosas como la heroína.
El tratamiento de esta patología depende del estadio en el que haya sido
diagnosticada. En las primeras fases suele bastar con la aplicación de
antibióticos específicos que actúan con mayor rapidez si se suministran por vía
intravenosa por lo que suele hacerse con la hospitalización del paciente. Si la
enfermedad está más avanzada, la Dra.
Rosario Cortina – Cardiología tiene que practicar una intervención
quirúrgica.